La disputa se da por los cargos que le corresponden a la oposición en empresas públicas y comisiones binacionales, sigue la tensión con Pedro Bordaberry.
El malestar en algunos sectores del Partido Colorado (PC) por la reunión entre el presidente electo, Yamandú Orsi, y Pedro Bordaberry no cede.
«Primero [se reunió] con los compañeros del Partido y de la Coalición Republicana y luego con el presidente electo y su equipo. Eso parece no haber caído bien en algunos amantes de hacer la plancha», afirmó Bordaberry. «Piensan que si uno no está en el gobierno debe oponerse a todo», se quejó.
Las tensiones internas en el Partido Colorado llegan en momentos en que la Coalición Republicana intenta reconstruirse luego del duro golpe que significó la derrota de su candidato presidencial, Álvaro Delgado.
Ese proceso de reconstrucción no es simple, puesto que se acompaña de negociaciones para ocupar cargos de poder, no solo en el liderazgo interno, sino también en los espacios que ostentará la oposición durante el futuro gobierno del Frente Amplio (FA).
Al respecto, comenzaron ya los primeros diálogos por los cargos de contralor que se adjudican a la oposición en las empresas públicas (Ancap, UTE, OSE, Brou, entre otros) y las comisiones binacionales del Río de la Plata, del Río Uruguay y de Salto Grande.
Desde Unir para Crecer, el sector del excandidato presidencial colorado, Andrés Ojeda, vieron la reunión entre Orsi y Bordaberry como un inicio en solitario de esas negociaciones y recordaron que el liderazgo del PC no le corresponde al senador electo.
Plantearon, en cambio, que la representación colorada en los puestos de contralor se adjudique con criterio electoral, informó El País. El sector de Ojeda fue el más votado, con 89.000 votos más que la lista de Bordaberry.
Fuente {Ambito






